“El tema central de este diploma son los temas de implementación de políticas de salud, pero enfocado en la gerencia social. La diferencia está en la implementación, donde las políticas son cada vez más complejas por la cantidad de actores involucrados o la cantidad de situaciones, lo que hace muy difícil su manejo y porque estamos en un mundo en donde los modelos de negocios no funcionan muy bien, sino que es un mundo del sector público o la sociedad civil en el que no hay un fin de lucro, sino de cumplir una misión. Por tanto, hay una forma especial de enfrentar el tema”, afirma el director y académico ESP, profesor José Sulbrandt.
Además “le damos un tratamiento especial a la ética, ya que se conoce la mirada clásica, desde el individuo y la evaluación de lo bueno y malo, y en salud muchas veces se analiza cuáles son las decisiones de los profesionales en relación a determinado paciente. Sin embargo, la ética también existe en instituciones y organizaciones y se manifiesta justamente en la implementación de políticas dentro de un marco valórico”, asegura el coordinador académico Dr. Cristián Rebolledo.
El diploma está dirigido a directivos y profesionales de centros asistenciales y organizaciones del sector de salud, tanto pública como privada, que se vinculen al diseño, implementación y evaluación de políticas y programas de salud. Surge de la alianza de la Escuela de Salud Pública con la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) y es el único diploma del mercado sobre políticas sociales en salud.
El profesor Sulbrandt subraya que "la gente cree en las instituciones y eso tiene un peligro enorme en el caso de que al interior de ella esté mal dibujada la cancha y existan una serie de elementos que afecten los resultados finales. Por eso es importante darse cuenta que la institucionalidad genera una forma de acciones que tienen que ver con la ética. Es relevante la ética individual, pero mucho más la institucional”.
Este diploma además tiene una vocación práctica, en donde los alumnos se verán enfrentados a problemas reales. “Me parece que lo más importante es que los alumnos conozcan los procesos y las herramientas que están vinculadas a la toma de decisiones”, agrega el Dr. Rebolledo.
“La toma de decisiones es central. No van a estar enfrentados a grandes decisiones, pero sí conocerán cuál es la lógica. Estamos en un mundo en el que el trabajo tiene que ser colaborativo, que genere confianzas, capital social al interior y ese es un tema profundamente delicado, pero en el que tenemos los instrumentos para llegar a un fin como ese. Hoy en Chile no generamos ningún capital social. En el curso veremos cómo hacer más efectiva la cooperación y colaboración, especialmente en este tipo de políticas que son generalmente interorganizacionales e intersectoriales”, afirma el director.
Liderazgo hoy en día
El docente explica que: “Los elementos básicos de un liderazgo han cambiado en los últimos años. El líder carismático que da órdenes y convence a los demás está en retirada en el mundo de la alta complejidad, que es donde aparece un liderazgo colaborativo. No hay ningún jefe que conozca todos los aspectos de un proceso, a menos que haya un liderazgo distribuido va a ser muy difícil llevarlo a cabo y eso supone otra forma de relacionarse con la gente”.
Respecto a lecciones que generen buenas prácticas, el profesor Sulbrandt afirma que “el manejo de conflicto es una buena práctica, sobre todo cuando uno tiene relaciones interorganizacionales la negociación siempre está presente, pero es mucho más omnipresente cuando tengo diversas organizaciones y dirijo la mía, pero no las otras. ¿Cómo hago para operar en conjunto? A menos que haga muy bien la negociación que me permita llegar a acuerdos reales con la gente va a ser muy difícil. Si no manejo las técnicas de conflicto, van a surgir una serie de elementos que van a separar en vez de cooperar, que tiene que ser el trabajo gerencial”.
En los estudios de casos, el coordinador destaca que “existen dos enfoques: uno sectorial, donde hay que articular el aparato público con otras instancias, niveles de complejidad, organizaciones, y otro enfoque multisectorial que se ha instalado en el sector como un estado deseado”.
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Sandra Vargas Bravo