Un Salón de Honor de la Casa Central de la Universidad de Chile copado por familiares y amigos fue el marco de la solemne ceremonia, que fue encabezada por el Rector Ennio Vivaldi, junto al prorrector Rafael Epstein, y el vicerrector de Asuntos Económicos y Gestión Institucional, Daniel Hojman, a través de la cual nuestro plantel reconoció a aquellos académicos y funcionarios que cumplieron 40 años de servicio en sus distintas unidades académicas y administrativas.
Guillermo Leyton, Coordinador Administrativo, de la Subdirección de Administración y Finanzas, fue uno de los 120 los integrantes de la comunidad universitaria que fueron reconocidos por su aporte a lo largo de cuatro décadas al desarrollo de nuestra institución, y con ello, del país.
Durante la ceremonia, uno a uno, los académicos y funcionarios recibieron la "Medalla 40 años de servicio" de manos del Rector Vivaldi, junto a un diploma conmemorativo, para disfrutar posteriormente de una presentación de la Camerata Vocal de la Universidad de Chile, dirigida por el maestro Juan Pablo Villarroel, la que interpretó las obras "Dieu" e "Yver", de Claude Debussy.
En nombre de la Universidad, el Rector Vivaldi agradeció a los homenajeados, cuya vida se encuentra fuertemente vinculada a la del plantel. "Si uno pudiera buscar una definición de la Universidad de Chile, está en conversar con aquella persona que decidió pasar su vida aquí, porque aquella persona tiene adentro de sí lo que de alguna manera calza con los valores de esta institución, y eso representan ustedes", aseguró.
Manifiesto del camino recorrido en estos 40 años
“Después de 40 años de servicio en esta, la primera Universidad del país, institución que me ha dado todo, sólo puedo manifestar que siento un gran orgullo, sin dejar de decir que también una gran emoción el haber ido superando metas en este largo devenir de mi vida institucional y de los logros alcanzados en mi carrera funcionaria, los que no dejan de ser pocos.
Me incorporé a la Universidad de Chile, en momentos difíciles para ella y el país, pero de una u otra forma he aprendido a crecer, tal como lo ha hecho la Universidad y que desde mi quehacer diario y mis funciones he ido aportando con esfuerzo, lealtad, compromiso, entrega y dedicación, tal como me lo dijeron mis primeros jefes al recibirme como un funcionario: que esta es una institución importante, que hay que respetarla, quererla y acogerla.
Al pasar los años he notado que no me he dado cuenta y a la vez me parece increíble cómo han transcurrido estos 40 años. El haber vivido buenos momentos, haber aprendido a superar los malos, compartir y trabajar junto a muy variadas y a la vez connotadas personas, colaborar desde mi función y cargo con un granito de arena en la formación de los profesionales que el país.
He crecido junto a la Universidad de Chile y en especial a la Facultad de Medicina, y prácticamente lo que soy se lo debo a esta distinguida institución, ahora con el paso del tiempo vislumbro ya la cercanía del retiro y veo que muchos de mis sueños se han cumplido y otros siguen siendo los mismos que tuve al inicio de mi carrera funcionaria, los mismos sueños y aspiraciones que he tenido junto a mi familia.
Agradezco con emoción y orgullo el que la Universidad de Chile, reconociera estos 40 años de trayectoria como funcionario en diversos cargos en el transcurso de mi vida laboral, los que han sido parte de mi desarrollo y a la vez desafíos que se han transformado en una gran experiencia y con humildad puedo decir que siento que con mi trabajo he aportado a que la Universidad de Chile sea cada día mejor”.
Texto Dircom-UChile / Verónica Zúñiga.