Este 25 de enero, la OPS/OMS oficializó a la Escuela de Salud Pública de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile como Centro Colaborador para el Desarrollo de Servicios, Capacitación e Investigación en el área de Salud Mental, reconociendo así un largo proceso de colaboración y de trabajo de académicos y académicas del Programa de Salud Mental de la Casa de Estudios.
El centro se desarrollará durante cuatro años y estará organizado en torno a tres ejes, estrategias y prevención del suicidio, programas de salud mental en infancia y adolescencia y situación de emergencia y desastres. Dentro de las funciones que se desarrollarán en esta iniciativa están la recopilación de datos para informes diagnósticos y de recomendaciones, la organización de reuniones técnicas regionales, la formulación de directrices en torno a materias específicas, y la divulgación científica.
Para Olga Toro, jefa del programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública y quien asume el desafío de coordinar el Centro, “recibimos esta designación con orgullo y humildad, es el primero en Chile y en Latinoamérica. Pienso que es la coronación de años de fructífera colaboración con un propósito común: promover y mejorar la salud mental de la población, considerando su determinación social y el respeto de los derechos humanos de las personas con problemas de salud mental”.
Agrega que esta designación “abre una nueva etapa que estará llena de desafíos. Renovamos el compromiso por la investigación, asistencia y formación en políticas, programas y servicios de salud mental desde la perspectiva de la salud pública, con especial atención a Latinoamérica”.
Por su parte el director de la misma institución doctor Óscar Arteaga señala que "el nombramiento que la Organización Panamericana y Mundial de la Salud (OPS/OMS) hace de nuestra Escuela de Salud Pública como Centro Colaborador, viene a fortalecer el trabajo que hacemos en formación de recursos humanos y contribución al desarrollo de políticas públicas en salud, que son parte de la vocación fundacional de nuestra Escuela”.
También plantea que “Salud Mental es un ámbito de la salud pública de extraordinaria trascendencia, el que ha incrementado su relevancia y visibilidad en el contexto de la pandemia que nos ha afectado estos últimos años y, por lo mismo, el reconocimiento que nos hace OPS/OMS, más allá del honor de la distinción que representa, constituye un enorme incentivo para seguir haciendo esfuerzos orientados a contribuir a mejorar la salud mental de la población, tanto en términos de prevención como en la organización de la respuesta del sistema de salud a los problemas que en este ámbito presenta la población de nuestro país".
Para la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS), este es un hito de interés para las Américas y para el mundo señaló el Representante de la OPS/OMS en Chile, Dr. Fernando Leanes. “Están hoy presentes la directora Mundial de Salud Mental de la OMS, Dra. Devora Kestel, el director de la OPS en Enfermedades No Transmisibles y Salud Mental, Dr. Anselm Hennis y el director de Salud Mental de la OPS, Dr. Renato Oliveira. Esperamos enormes desafíos en este tema en Chile. Es un tema de enorme complejidad que se agravó significativamente por efecto de los confinamientos por COVID-19. Pero hay también una oportunidad grande, la demanda aumentó también porque este tema es menos estigmatizante y el gobierno de Chile lo ha puesto en el nivel de prioridad que correspondía”, destaco el Dr. Leanes.
Por su parte, el decano de la Facultad de Medicina, Miguel O'Ryan, destacó que "este es un reconocimiento al trabajo académico relevante del equipo de la escuela de Salud Pública, y que puede y debe entenderse más allá de nuestras facultades, hacia el continente, hacia el mundo en el ámbito de esta colaboración. El área temática no puede ser más relevante, actual y contundente". Asimismo, relevó que "la colaboración con la OPS será una contribución significativa de nuestra Facultad hacia las Américas, pero será también una oportunidad muy importante para avanzar en más y mejores estrategias que debemos implementar al interior de nuestra propia universidad. Agradezco por ello a la OPS y a nuestro y nuestras académicas por esta significativa colaboración. Esperamos que de frutos e impacto para una mejor salud y bienestar, hoy un sentido anhelo de nuestras comunidades".
Los Centros Colaboradores de la OPS/OMS son instituciones que han sido aliados por años y cuyos integrantes han contribuido con trabajos que permiten alcanzar las metas de OPS/OMS. Cumpliendo ciertos estándares, la OMS reconoce a estas instituciones formalizando el vínculo de colaboración a través de la designación oficial como Centro Colaborador.
Esta nueva colaboración genera beneficios para ambas partes. La OMS tiene acceso a las principales instituciones a nivel mundial y a la capacidad institucional para apoyar su trabajo. De manera análoga, las instituciones designadas como Centro Colaborador adquieren mayor visibilidad y el reconocimiento de las autoridades nacionales, además de que aumenta la atención del público a los problemas de salud en los cuales trabajan.
¿Qué implica esta designación?
El proyecto, se organiza en tres líneas temáticas: Estrategias de prevención del suicidio; Programas de salud mental en infancia y adolescencia; y Situaciones de emergencia y desastres. En cada una de estas tres líneas, se desarrollarán actividades orientadas a contar con revisión de evidencia para retroalimentar las políticas, estrategias de incorporación activa en los planes nacionales de salud mental de los países de la región, generar encuentros de colaboración entre países y proponer material de divulgación para distintos públicos.
Tal como lo ha señalado OMS en relación con los Centros Colaboradores, “esta relación beneficiosa representa un cambio para la salud pública a nivel mundial. La OMS alienta a cada institución designada a sacar el mayor provecho posible de esta relación oficial”.
Cabe señalar que este nuevo hito de colaboración internacional, se recibe en un momento especial para la Escuela de Salud Pública, pues este año cumple 80 años.
La Salud Mental como hilo conductor de la Salud Pública en Chile y el mundo
La historia de colaboración en salud mental desde la Escuela de Salud Pública es posible remontarla a partir de los años 90 recién recuperada la democracia en nuestro país, inspirada en la Declaración de Caracas por la Desinstitucionalización Psiquiátrica en la Región de las Américas, década en la cual los que fueran los primeros integrantes del Programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública contribuyeron de manera relevante en comisiones de trabajo, investigación y producción de material técnico para avanzar en la incorporación de la salud mental en el sistema de salud de los países de la región, aun cuando en ese entonces no existía el Programa de Salud Mental como tal.
Luego de un arduo y fructífero trabajo académico, en la década del 2000 se constituye por primera vez la “Unidad de Salud Mental” de la Escuela de Salud Pública dirigida por el Dr. Rubén Alvarado. Importante impulso para fortalecer el trabajo de colaboración internacional de sus integrantes. Luego, para el año 2018 la desatacada productividad académica fue coronada con la aprobación por el Consejo Universitario del Magister en Salud Mental y Psiquiatría Comunitaria, único en el país y la región. Este grado de madurez permitió que la Escuela de Salud Pública otorgara a la unidad la calidad de Programa de Salud Mental cuyo primer encargado fue el Dr. Alberto Minoletti. Por ello esta designación representa un importante reconocimiento a la contribución que los y las integrantes del Programa de Salud Mental agradecen, y al mismo tiempo comprometen honrar con el trabajo que se desarrollará en el marco del Centro Colaborador.
Entre algunas de las colaboraciones recientes se puede mencionar que la versión en español del instrumento para evaluar la calidad de los servicios de salud mental con enfoque de derechos humanos de la OMS conocido como “QualityRights” es producto de un proyecto de investigación ANID realizado por el Programa de Salud Mental de la Escuela de Salud Pública. También la participación en la publicación técnica “Desinstitucionalización de la atención psiquiátrica en América Latina y el Caribe” (2020) en el marco de los 30 años de la Declaración de Caracas. La asistencia para el desarrollo de sistema de información regional y subregional de OPS/OMS que permita evaluar el avance de las políticas, planes y desarrollo de los servicios de salud mental de manera oportuna y eficiente (2021). La asistencia técnica a países de la región coordinado por OPS/OMS. Hasta la participación del Dr. Rubén Alvarado como integrante de la Comisión de Alto Nivel sobre Salud Mental y COVID-19 de OPS/OMS.
A esto se suman proyectos de investigación que retroalimentan y apoyan los planes de acción de salud mental regional de OPS/OMS, como el estudio sobre los efectos negativos en la salud mental de los trabajadores sanitarios durante la pandemia COVID-19, los efectos de la emergencia sanitaria en la disponibilidad de servicios de salud mental, la evaluación de la efectividad e implementación de modelos innovadores de atención a personas con diagnóstico de primer episodio de psicosis, estrategias de prevención del suicidio, la evaluación de la calidad de servicios de salud mental, la evaluación de las políticas de salud mental, entre muchos otros. El sello es la perspectiva de salud pública, derechos humanos y salud mental comunitaria.
Actualmente, el equipo del Programa de Salud Mental está conformado por (orden alfabético de primer apellido): Rubén Alvarado, Margarita Becerra, Joan Calventus, Esteban Encina, Gonzalo Leyton, Carlos Madariaga, Pablo Norambuena, María Sol Pastorino, Rafael Sepúlveda, Camila Solís, Gonzalo Soto y Olga Toro Devia, con el trabajo comprometido de Pamela Sánchez en las labores administrativas.
Este es el equipo basal del Centro Colaborador. Sin embargo, se ha propuesto un diseño de gobernanza que convoca a académicos y académicas de todos los programas de la Escuela de Salud Pública, y también de la Facultad de Medicina, con importante experiencia en la investigación y formación en el campo de la salud mental, desde distintas perspectivas disciplinarias. El proyecto aspira a ser un espacio de encuentro y colaboración para apoyar las políticas a favor de la salud mental en la región.