La iniciativa fue organizada por la Mesa de Educación No Sexista y la Dirección de Género de la Facultad de Medicina, DIGEN Salud, con el objetivo de reflexionar sobre la formación y la educación universitaria desde una perspectiva de igualdad y no discriminación. Contó con la ponencia de las profesoras Soledad Falabella, académica del Departamento de Literatura de la Facultad de Filosofía y Humanidades de la Universidad de Chile; Amaya Pavez, doctora en Antropología y académica de Salud Pública de la Universidad de Santiago; Viviana Sobrero, jefa Unidad de Docencia del Departamento de Pregrado de la Vicerrectoría de Asuntos Académicos, y Pamela Eguiguren, docente de la Escuela de Salud Pública de nuestro plantel.
Al abrir el encuentro, el decano de la Facultad de Medicina, doctor Miguel O’Ryan, señaló que “entendemos que la perspectiva de género y educación no sexista implica un enfoque crítico y reflexivo sobre las desigualdades de género presentes en la sociedad y sus manifestaciones en el ámbito educativo. Es, por cierto, en el mundo educativo donde se patentan y materializan con mucha claridad todo tipo de desigualdades; basta con consignar que las principales reformas educativas implementadas en Chile desde mediados del Siglo XIX -salvo durante la dictadura-, todas tienen un componente que apunta a corregir desigualdades. A nuestro parecer, en el contexto de la formación en salud, el enfoque de género debiera abordar los estereotipos y las normas culturales que pueden influir en la forma en que se brinda atención en salud, se investiga y se desarrollan políticas sanitarias. La incorporación de la perspectiva de género en la educación superior debe, por lo tanto, fomentar una educación inclusiva y equitativa, que promueva el respeto por la diversidad y el reconocimiento de la igualdad de derechos y oportunidades para todas las personas, independientemente de su género”.
Por ello, añadió, “estudiantes, docentes y funcionarios y directivos debemos asumir que esta tarea es transversal a toda la institución y que desde nuestro lugares y mundos locales debemos trabajar para y por los desafíos que enfrentan las personas en el acceso y utilización de los servicios, y cómo las diferencias de género pueden afectar la calidad de la atención y los resultados de salud. La formación resulta ser la llave maestra para el cambio progresivo de paradigmas y para que un futuro cercano podamos ver resultados en esta lucha contra las desigualdades. Aspiramos a que en el modelo educativo la perspectiva de género y educación no sexista en la formación en salud apunte a garantizar una formación integral y diversa, además de promover un enfoque más humano, justo y equitativo en la atención y el cuidado de la salud”.
Igualdad de oportunidades
Luego, la directora de Igualdad de Género de nuestra institución, profesora Denisse Quijada, dijo a los presentes estar muy satisfecha pues “se está materializando un trabajo colectivo hecho junto a la Mesa de Educación No Sexista de la Facultad de Medicina, integrada por representantes de las distintas unidades académicas del plantel. Esta labor se organiza en un diálogo permanente para poder conocer el estado actual de la educación no sexista y con perspectiva de género en salud y promoverla”. Asimismo, recordó que esta mesa se conformó a fines de 2020, fecha desde la que han estado recogiendo información en el tema, por ejemplo mediante la aplicación de la primera encuesta de educación no sexista en salud a mediados de 2021. Por último, señaló que este trabajo debe ser un compromiso permanente para avanzar hacia la igualdad y equidad de oportunidades y la formación en salud con perspectiva de género.
Durante su exposición, las panelistas respondieron a preguntas planteadas en torno a cómo ha sido su trayectoria en cuanto a materia de género y formación universitaria, los avances en términos de currículum no sexista en las carreras de la salud, y qué faltaría para tener mayores logros. Posteriormente, los asistentes trabajaron en grupos para luego presentar sus reflexiones durante la sesión plenaria.